SEMANA
SANTA 2019
Haced esto en memoria mía
HORARIO DE CULTOS DE LA
PARROQUIA
Domingo de Ramos (14 de
Abril)
12,30: Bendición
de Ramos (en la Plaza de San Antonio), Procesión y Eucaristía
Lunes
Santo (15 de Abril)
7 de la tarde Eucaristía y a las 7,30 Charla cuaresmal: Gaudete et exsultate, Alegraos y regocijaos
Miércoles
Santo (17 de Abril)
7 de la tarde, Eucaristía en el monasterio
Jueves
Santo (18 de Abril)
7,30 de la tarde: Misa de la Cena del Señor. Procesión
11 de la noche: Hora Santa
Viernes
Santo (19 de Abril)
8 de la mañana: Vía-Crucis de Penitencia
7,30 de la tarde: Oficios de la Pasión del Señor. Procesión del Santo Entierro
Sábado
Santo (20 de Abril)
9,30 de la noche: Vigilia Pascual
Domingo
de Resurrección (21 de Abril)
12,30 de la mañana: Procesión del Encuentro
y Misa de la Pascua de Resurrección
Lunes
de Pascua (22 de Abril) Empanada
HORARIO
DE CULTOS DEL MONASTERIO
Domingo de Ramos: Eucaristía
a las 9 de la mañana
Lunes
y martes Santo: Eucaristía
a las 9 de la mañana
Miércoles Santo: Eucaristía a las 7
de la tarde
Jueves
Santo: Misa de la cena del
Señor a las 6 de la tarde
Hora Santa a las 10 de la noche
Viernes
Santo: Oficios de la Pasión
a las 6 de la tarde
Sábado
Santo: Vigilia Pascual a las
10 de la noche
Domingo
de Resurrección: Eucaristía
de Pascua a las 9 de la mañana
Domingo de
Ramos: “Jesús
caminaba delante de sus discípulos, subiendo hacia Jerusalén…encontraréis un
pollino atado” (Lc 19,28.30). Jesús acoge las aclamaciones en la humildad
de un pollino; igualmente acogerá a los que gritan “¡Crucifícalo, crucifícalo!” (Lc 23,21). Lucas, el evangelista, nos
seguirá ayudando a acompañar a Jesús y su misericordia.
Jueves
Santo:
“Se levanta de la cena, se quita el
manto y, tomando una toalla se la ciñe” (Jn 13,4).En la cena de despedida,
nos dejará su mandato: “haced esto en
memoria mía” (Lc 22,19). Lo hacemos en cada Eucaristía que celebramos y
también cada vez que nos lavamos los pies unos a otros como expresión de amor.
Viernes Santo:
Ponemos en el centro del día la Cruz y la lectura de la Pasión de Juan.
Acompañamos a Jesús en su entrega por nosotros. Le escuchamos una vez más decir:
“Está cumplido” (Jn 19,30). La vida
tiene sentido cuando se cumple a lo que ha sido enviado.
Pascua
de Resurrección: En la noche y día Santo de Pascua:
“¿por qué buscáis entre los muertos al
que vive?. No está aquí. Ha resucitado” (Lc 24,5-6) Vivimos la alegría de
la presencia del Resucitado en medio de nosotros.
Llegan los días grandes
para la vida de los cristianos. Nos disponemos para celebrar el centro de nuestra
fe: la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Son los misterios que dan
sentido a nuestra fe y estamos llamados a vivirlos como comunidad.
Jesús, en la Cena de
despedida proclamaba: “haced esto en
memoria mía” (Lc 22,19); son palabras que escuchamos en cada Eucaristía que
celebramos, cumpliendo así, el mandato de Jesús. En estos días santos queremos
poner los ojos y el corazón en Jesús para que esas palabras no se reduzcan a un
cumplimiento ritual, sino que es toda su vida la que se nos propone para que
nos identifiquemos con él haciendo memoria suya.
El papa Francisco en su
Exhortación Apostólica Gaudete et exsultate
(Alegraos y regocijaos), invita a
los cristianos a dejar resonar en nosotros, una vez más, la llamada a la
santidad; nos decía: “en el fondo, la
santidad es vivir en unión con él (Cristo) los misterios de su vida. Consiste
en asociarse a la muerte y resurrección del Señor de una manera única y
personal, en morir y resucitar constantemente con él” (GE 20).
Eso es lo que queremos
estos días: que Jesús nos enseñe a ser santos. Abrimos el corazón para vivir
con intensidad las celebraciones; en ellas será Jesús quien, puesto en medio de
nosotros, se pone a servir lavando los pies, se hace alimento en la misma cena
de despedida, entrega su vida en la cruz, es resucitado por el Padre
abriéndonos a la vida.
Que estos días santos
los vivamos como familia cristiana que se reúne para celebrar desde la fe.
¡Feliz pascua para todos!